LIGA ARGENTINA MÉDICA ASISTENCIAL DE VILLA CRESPO
Por Eduardo Horacio Bolan
Una de las Instituciones más emblemáticas del barrio de
Villa Crespo que aún existe y que ha
sabido mantener sus puertas abiertas para el bien de la Comunidad es LIGA ARGENTINA MÉDICA ASISTENCIAL DE VILLA CRESPO
(L.A.M.A.) Asociación Civil sin fines de lucro con Personería Jurídica.
Cercano al Centenario de su creación, año 1919, es meritorio recordar aspectos sobresalientes de este establecimiento sanitario.
Hoy en día ha debido trasladarse provisoriamente a una nueva sede ubicada en la calle Otamendi 629 (casi esquina Av. Díaz Vélez) en el sector del 1º piso. Debido esto a la reestructuración total edilicia que se hará en el solar donde estaba ubicada hasta mediados del mes de julio 2017. El cuerpo médico con sus diversas especialidades, la atención esmerada y los amplios horarios se mantiene inalterable para una mejor atención de la salud humana.
Es momento de hacer un poco de historia y rememorar la inauguración de esta Entidad sin fines de lucro. Qué mejor para ello que citar a uno de sus Presidentes recientes más importantes, Don Narciso Nicolás De Filpo (h) homónimo de su padre que también presidiera esa Institución. En el libro “Un vuelo de palabras en la Biblioteca Popular Alberdi” (Ed. Dunken, 2013) en su escrito “Apuntes históricos sobre la trayectoria de Liga Argentina Médica Asistencial de Villa Crespo”, nos dice: “Un grupo de abnegados y esforzados vecinos de Villa Crespo, avalados por el Dr. Gregorio Aráoz Alfaro, destacado médico y titular de Liga Argentina contra la tuberculosis, que desarrollaba sus actividades en el barrio de Palermo, decide fundar, visto el estrago que producía la tuberculosis para ese entonces en la ciudad de Buenos Aires, al que no escapaba el barrio de villa Crespo, una Institución similar para dar lucha al terrible flagelo. Fue así que el día 4 de junio de 1919 en el Club Social San Bernardo, hoy desaparecido, se labra el Acta de su fundación de la que se llamaría por entonces “LIGA ARGENTINA CONTRA LA TUBERCULOSIS – COMISIÓN VILLA CRESPO”. Esta Liga se instala en forma provisoria en un edificio de la calle Malabia 233.”
No sólo el famoso Club San Bernardo, que databa su fundación del año 1912 producto de la unión de otros dos clubes del barrio, ya no existe. La LIGA ARGENTINA CONTRA LA TUBERCULOSIS madre, en mi decir ya que fue la que dio origen a la vecinal, tampoco existe, sus puertas se cerraron definitivamente hace años.
Es por eso la importancia de que L.A.M.A. continúa en el tiempo y mantiene intacta su trayectoria y la sapiencia de los que la integran en honor de quienes marcaron el camino.
Sigamos con lo que nos dice Nicolás De Filpo: “Dada la importancia de la asistencia médica que prestaba la Liga (la “Salita” como cariñosamente la reconocían los vecinos), la Institución fue ganando prestigio. Por la gran afluencia de pacientes, la Liga, se ve en la imperiosa necesidad de ampliar sus instalaciones. Para tal fin se reúnen fondos entre los vecinos y se adquieren tres lotes en la entonces calle Godoy Cruz 542 (hoy Av. Juan B. Justo 2651) entre las calles Camargo y Triunvirato (hoy Av. Corrientes).”
En mi afán de que sean fuentes documentales, siempre que sea posible, las que hablen por sí mismas en la investigación que llevo a cabo, seguiré basándome en registros de la época, en testimonios de los que vivieron intensamente esos años o que le fueran contados de primera mano por sus padres, tal es el caso de Don Nicolás De Filpo (1920-2015) y en artículos periodísticos, como la publicación “Confederación Nacional de Beneficencia”.
En la primera plana de su edición de abril de 1925 nos relata: “Fue inaugurado el día 25 el edificio de la calle Godoy Cruz 542, en el que la Liga Argentina contra la Tuberculosis ha establecido el Dispensario Dr. Eduardo Wilde. A la ceremonia realizada por tal motivo asistieron el presidente de la república y su esposa, el intendente municipal… el Dr. Gregorio Aráoz Alfaro, las autoridades de la Liga Argentina contra la Tuberculosis, las de la Comisión Vecinal y una concurrencia numerosa de damas y caballeros del vecindario. Después usó de la palabra el presidente del Departamento Nacional de Higiene, doctor Gregorio Aráoz Alfaro, quien en frases elocuentes aplaudió el esfuerzo de la Comisión Vecinal, la única, dijo, que en el corto espacio de tiempo que lleva funcionando ha cumplido en forma tan completa la obra humanitaria que se ha impuesto.”
El Estatuto Social inicial, de esta organización no gubernamental, ya incluía un Dispensario destinado a proporcionar asistencia o tratamiento médico a pacientes que podían trasladarse (consultorios externos). Así lo encontramos en el Capítulo IX de dicho Estatuto, el cual en su art. 45 establece: “De acuerdo con los fines estatutarios, la “Liga Argentina contra la Tuberculosis, Comisión Villa Crespo” contribuirá al sostenimiento de un dispensario para tuberculosis y niños débiles, el que será dirigido, en lo que se refiere a la parte técnica, por un médico director…”
Con estos antecedentes y con casi cien años de existencia ininterrumpida, L.A.M.A. se propone ingresar al siglo XXI en un nuevo edificio acondicionado óptimamente para la atención de la salud humana en consultorios externos.
En el interín, la atención médica de calidad se lleva a cabo, como fuera dicho más arriba, en Otamendi 629 – 1º piso. Será en su centenario cuando reabra las puertas en la Av. Juan B. Justo.
Cercano al Centenario de su creación, año 1919, es meritorio recordar aspectos sobresalientes de este establecimiento sanitario.
Hoy en día ha debido trasladarse provisoriamente a una nueva sede ubicada en la calle Otamendi 629 (casi esquina Av. Díaz Vélez) en el sector del 1º piso. Debido esto a la reestructuración total edilicia que se hará en el solar donde estaba ubicada hasta mediados del mes de julio 2017. El cuerpo médico con sus diversas especialidades, la atención esmerada y los amplios horarios se mantiene inalterable para una mejor atención de la salud humana.
Es momento de hacer un poco de historia y rememorar la inauguración de esta Entidad sin fines de lucro. Qué mejor para ello que citar a uno de sus Presidentes recientes más importantes, Don Narciso Nicolás De Filpo (h) homónimo de su padre que también presidiera esa Institución. En el libro “Un vuelo de palabras en la Biblioteca Popular Alberdi” (Ed. Dunken, 2013) en su escrito “Apuntes históricos sobre la trayectoria de Liga Argentina Médica Asistencial de Villa Crespo”, nos dice: “Un grupo de abnegados y esforzados vecinos de Villa Crespo, avalados por el Dr. Gregorio Aráoz Alfaro, destacado médico y titular de Liga Argentina contra la tuberculosis, que desarrollaba sus actividades en el barrio de Palermo, decide fundar, visto el estrago que producía la tuberculosis para ese entonces en la ciudad de Buenos Aires, al que no escapaba el barrio de villa Crespo, una Institución similar para dar lucha al terrible flagelo. Fue así que el día 4 de junio de 1919 en el Club Social San Bernardo, hoy desaparecido, se labra el Acta de su fundación de la que se llamaría por entonces “LIGA ARGENTINA CONTRA LA TUBERCULOSIS – COMISIÓN VILLA CRESPO”. Esta Liga se instala en forma provisoria en un edificio de la calle Malabia 233.”
No sólo el famoso Club San Bernardo, que databa su fundación del año 1912 producto de la unión de otros dos clubes del barrio, ya no existe. La LIGA ARGENTINA CONTRA LA TUBERCULOSIS madre, en mi decir ya que fue la que dio origen a la vecinal, tampoco existe, sus puertas se cerraron definitivamente hace años.
Es por eso la importancia de que L.A.M.A. continúa en el tiempo y mantiene intacta su trayectoria y la sapiencia de los que la integran en honor de quienes marcaron el camino.
Sigamos con lo que nos dice Nicolás De Filpo: “Dada la importancia de la asistencia médica que prestaba la Liga (la “Salita” como cariñosamente la reconocían los vecinos), la Institución fue ganando prestigio. Por la gran afluencia de pacientes, la Liga, se ve en la imperiosa necesidad de ampliar sus instalaciones. Para tal fin se reúnen fondos entre los vecinos y se adquieren tres lotes en la entonces calle Godoy Cruz 542 (hoy Av. Juan B. Justo 2651) entre las calles Camargo y Triunvirato (hoy Av. Corrientes).”
En mi afán de que sean fuentes documentales, siempre que sea posible, las que hablen por sí mismas en la investigación que llevo a cabo, seguiré basándome en registros de la época, en testimonios de los que vivieron intensamente esos años o que le fueran contados de primera mano por sus padres, tal es el caso de Don Nicolás De Filpo (1920-2015) y en artículos periodísticos, como la publicación “Confederación Nacional de Beneficencia”.
En la primera plana de su edición de abril de 1925 nos relata: “Fue inaugurado el día 25 el edificio de la calle Godoy Cruz 542, en el que la Liga Argentina contra la Tuberculosis ha establecido el Dispensario Dr. Eduardo Wilde. A la ceremonia realizada por tal motivo asistieron el presidente de la república y su esposa, el intendente municipal… el Dr. Gregorio Aráoz Alfaro, las autoridades de la Liga Argentina contra la Tuberculosis, las de la Comisión Vecinal y una concurrencia numerosa de damas y caballeros del vecindario. Después usó de la palabra el presidente del Departamento Nacional de Higiene, doctor Gregorio Aráoz Alfaro, quien en frases elocuentes aplaudió el esfuerzo de la Comisión Vecinal, la única, dijo, que en el corto espacio de tiempo que lleva funcionando ha cumplido en forma tan completa la obra humanitaria que se ha impuesto.”
El Estatuto Social inicial, de esta organización no gubernamental, ya incluía un Dispensario destinado a proporcionar asistencia o tratamiento médico a pacientes que podían trasladarse (consultorios externos). Así lo encontramos en el Capítulo IX de dicho Estatuto, el cual en su art. 45 establece: “De acuerdo con los fines estatutarios, la “Liga Argentina contra la Tuberculosis, Comisión Villa Crespo” contribuirá al sostenimiento de un dispensario para tuberculosis y niños débiles, el que será dirigido, en lo que se refiere a la parte técnica, por un médico director…”
Con estos antecedentes y con casi cien años de existencia ininterrumpida, L.A.M.A. se propone ingresar al siglo XXI en un nuevo edificio acondicionado óptimamente para la atención de la salud humana en consultorios externos.
En el interín, la atención médica de calidad se lleva a cabo, como fuera dicho más arriba, en Otamendi 629 – 1º piso. Será en su centenario cuando reabra las puertas en la Av. Juan B. Justo.
eduardobolan@gmail.com
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